Sarah es una alumna de español muy lista, aunque a veces tiene la impresión de que no está lista para mantener una conversación con hablantes nativos, lo que le provoca una cierta frustración 🥺.
Elijah es un estudiante muy atento con sus compañeros y profesores, aunque a veces le cuesta estar atento en clase, ya que se dispersa con frecuencia 🙄.
Ryan, por su parte, es un alumno muy inteligente, aunque un poco orgulloso, de ahí que le cueste pedir ayuda a sus compañeros o no siempre acepte de buen grado la retroalimentación de sus profesores 😒.
Emma está muy orgullosa de todos sus avances con el español 😌, ya que al principio no se le daba muy bien: estaba aburrida en clase y le costaba estar despierta a primera hora de la mañana 🥱😪.
Soleil es una estudiante muy despierta, pues entiende al momento los conceptos más complejos 😏. Cuando una explicación está clara para ella, quiere hacérselo saber a toda la clase, lo que hace que en ocasiones sus compañeros estén molestos con su actitud 😮💨.
Tom es muy maniático: no le gustan las aulas que son demasiado claras porque dice que la luz excesiva es molesta y le impide concentrarse 🤨.
Anna piensa que su español es muy malo, quizás porque se ha perdido bastantes clases al haber estado mala de la barriga durante varias semanas por comer fruta que estaba demasiado madura 🤢.
Riccardo es un alumno muy maduro para su edad 🤔, pese a ser el más joven del grupo, si bien dicha sensatez hace que a veces sus compañeros piensen que es un aburrido al que no le gustan las bromas en clase 🥱.
Como ves, tenemos una clase con perfiles muy diferentes, pero con un elemento en común: su gusto por aprender la lengua de Cervantes 🥰. Y hay algo más: si unes las iniciales de sus nombres a modo de acróstico, obtendrás uno de los contenidos más desafiantes (en sentido positivo) con los que nos encontramos como profes de español 😉.
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